Buscar chalets de montaña en Westfjords

El hot SPRING, que en realidad son dos. Hay uno que es una piscina grande, ideal para nadar. El otro es súper natural, de piedra y con musgo, es un gustazo. El canto de los pájaros en primavera es bestial. Hay una casa-museo tradicional con tejado de césped que es muy interesante, sobre todo de noche que está iluminado por dentro.

La casa es preciosa. Super cómoda, sobre todo si subes por la zona Oeste (para ir a ver Dynjandi, etc.) al otro lado hay un barco abandonado super chulo. En alojamiento en si nos encantó, tiene de todo. Nosotros justo estuvimos solos. La cocina super bien equipada, el baño también (suelo calefactable, puntito muy de agradecer si vas en invierno) Se aparca en la puerta... Repetiría sin dudarlo ❤️

La casa está completamente reformada y su historia (que podréis leer en un póster enmarcado en el comedor) es muy bonita. Desde nuestra habitación se podía ver el mar entrar en el fiordo, escuchar las gabiotas...fue precioso. En cuanto a la casa, la compartimos con un grupo de 4 amigas, que se alojaron en la planta superior, y una chica que viajaba sola, que se alojaba en la planta inferior. Pese a ser 7 en la casa, los espacios son suficientemente grandes y cómodos para todos.

La casa de verano, espectacular. Tiene capacidad para 8 personas y esta perfectamente equipada. Una casa muy acogedora para grupos grandes y alquilarla entera. Tanto el dueño como el personal, super amable y servicial.

Que no coincidimos con nadie y tuvimos la casa para nosotras

Empleados muy amables, la casa que alquilamos estaba limpia y en buenas condiciones. Cerca hay una cascada preciosa. Hay opción de comer en el restaurante, por aproximadamente 16 euros te dan sopa del día (buenísima!) y pan casero, se puede repetir sin mayor coste. En wikiloc hay una ruta desde la que se puede ver la bahía desde lo alto de las colinas, recomendable. Tuvimos un problema con el coche y el dueño nos ayudó muchísimo (gracias de nuevo :) ).

Todo, absolutamente TODO!!!! El lugar, habitaciones, baño, cocina, sala de estar, desayuno insuperable. Hemos estado como en casa.

Casa de campo, bonita, con bañera de hidromasaje en el exterior para relajarte después de todo el día viajando. El agua estaba a unos 38° y resultó muy agradable el baño. La casa tiene todo lo necesario si quieres cocinar, hasta barbacoa.

El único hotel de la ciudad que permanece abierto todo el año. Tuve que pasar dos noches, pues me quedé bloqueado por un temporal. Disfruté como un niño contemplando la furia de la naturaleza desde la ventana de mi habitación, con vistas sobre el fiordo. La señora que atiende la recepción fue increíblemente amable. La habitación, sencilla pero correcta.

La habitación era cómoda y espaciosa. Las instalaciones de madera son muy bonitas. Hay 2 lavabos con duchas para toda la casa, más que suficientes. Estuvimos solos y lo disfrutamos mucho. Tienen pizzería propia y las pizzas son increíbles, nada mejor que llegar de un largo viaje y comerse una. El desayuno muy bueno: huevos fritos con bacon y tostadas con mermelada, todo genial.